martes, 28 de abril de 2015

El 'tridente asesino', a por el récord de los 118 goles

El "tridente asesino", a por el récord de los 118 goles


Los debates se sucedieron en la previa del Barcelona-Getafe en torno a la posibilidad de que Luis Enrique hiciera rotaciones en la delantera con vistas a la semifinal de Champions contra el Bayern, pero la voraz realidad de Messi, Neymar y Suárez contuvo la tentación del asturiano, que compensó concediendo descanso completo a Piqué, Mascherano y Rakitic y parcial a Busquets y Alves.
El técnico prefirió no aguarle el festival a una sociedad ofensiva que afronta el tramo decisivo de la temporada con la puntería afinada y la química todavía en fase creciente. Poco importó que el choque se resolviera al descanso. Conviene no generar tensión a estas alturas. Y si el sufridor Pedro tiene que jugar algún minuto, que sea para ocupar la plaza de un centrocampista. De Xavi, por ejemplo.
El Barça arrolla y aspira a todo gracias al poder aplastante de un tridente ofensivo que, a falta de un máximo de ocho partidos para terminar la temporada, ya suma 102 goles. Sólo la tripleta formada por Cristiano Ronaldo, Benzema e Higuaín en la temporada 2011-12 consiguió marcar más goles de los que ahora acumula la MSN, 118. La delantera azulgrana tiene ahora un mínimo de siete partidos para alcanzar el récord madridista. Entre todas las competiciones, Messi suma 49 tantos, Neymar está con 32 y Suárez, pese a haber esperado hasta finales de octubre para debutar de azulgrana, acumula 21.
Luis Suárez, satisfecho
El punta uruguayo está en racha. Ayer firmó un doblete, dio dos asistencias y forzó un penalti y ha visto portería siete veces en otros tantos encuentros. "Trato de ayudar al equipo y están saliendo los goles", explicó él mismo sobre el césped del Camp Nou.
Suárez añadió: "Hemos hecho un buen partido sobre todo en los primeros 45 minutos. Ha sido importante porque se consiguen tres puntos vitales y se ha demostrado que el compromiso es máximo. Estamos obligados a conseguir cosas". Claudio Bravo, polo opuesto del charrúa en el campo, remató con admiración: "Hemos hecho un fútbol avasallador".